No es fácil, nunca es fácil dejar ir a alguien que se ama. Se requiere coraje, mucho.
Dejar ir a alguien , en realidad ,es dejar ir una parte de nosotros mismos, una parte que probablemente ya no volverá.Y lo que es peor, hay personas que jamas pensaste al comenzar que se harían tan imprescindibles en tu vida, y en cambio han llegado tan al fondo de tu alma, que cuando se van, nada vuelve a ser igual.
Pero , ve, ve y se feliz.
Y.... si mas adelante descubres que me extrañas, y yo te extraño, quien sabe, quizás volvamos a estar juntos
Si por contra, esto es un final, solo me quedará darte las gracias, por tus sonrisas, tus abrazos, tus besos, por hacerme ser yo misma, por presentarme la alegría de vivir, por tu apoyo, por cuidar de mi, por ser y por estar...
Y si no vuelves,al menos quiero que sepas, que para mi no fue una historia, nada fue en vano, cuando dije " te quiero", era real y sentido, desde el centro de mi alma.
Es increíble que sea en la agonía de la despedida, cuando la mayoria de las veces, somos capaces de comprender la profundidad de nuestros sentimientos, del amor.
Ojala no sea un adiós, ojala sea solo un hasta luego.
Como cuesta despedirse¡¡
No hay peor despedida que la que no se planea..........pero ya está aqui.
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